Descifrando las habilidades compartidas entre el camino hacia la recuperación y la capacitación en bienestar
En ocasiones, dos logros aparentemente dispares pueden tener similitudes inesperadas. En mi experiencia personal, superar una adicción devastadora a los analgésicos recetados y convertirme en un entrenador de salud y bienestar son dos logros que comparten habilidades y prácticas comunes. Estas habilidades incluyen:
1. Gratitud y mindfulness
Mantener una actitud de gratitud hacia lo positivo en nuestra vida y hacia las personas que nos rodean es una práctica clave tanto en la recuperación como en la mejora del bienestar. Además, practicar el mindfulness y la presencia en el momento nos ayuda a desarrollar una mayor conciencia de nuestras emociones y pensamientos, lo que contribuye a un mayor equilibrio emocional.
2. Adoptar hábitos saludables
El ejercicio regular, una alimentación equilibrada y un descanso adecuado son componentes esenciales tanto para superar una adicción como para mantener un estado de bienestar óptimo. Estos hábitos saludables fortalecen nuestro cuerpo y mente, y nos proporcionan la energía necesaria para enfrentar los desafíos diarios.
3. Conexión y empatía
Establecer conexiones significativas con los demás y fomentar una comunicación abierta y honesta son elementos cruciales tanto en la recuperación como en la promoción del bienestar. La empatía, tanto hacia los demás como hacia uno mismo, nos ayuda a construir relaciones saludables y a desarrollar una mayor comprensión de nuestras propias necesidades emocionales.
Además de estas habilidades compartidas, hay un componente crítico que contribuye a la serenidad y el enfoque necesarios tanto para ser un entrenador de bienestar como para superar una adicción: reconocer y desactivar las distorsiones cognitivas.
Desactivando las distorsiones cognitivas para liberar nuestro potencial
Las distorsiones cognitivas son filtros mentales internos que aumentan nuestra miseria y alimentan nuestra ansiedad. Estos filtros, aunque a veces útiles, pueden tener un impacto negativo en nuestra salud mental y emocional si no los reconocemos y desactivamos. Aquí hay algunas de las distorsiones cognitivas más comunes:
Pensamiento rumiante: Consiste en patrones de pensamientos negativos que se repiten en nuestra mente, contribuyendo a la infelicidad y la alienación.
Pensamiento en blanco y negro: Sucede cuando vemos las cosas desde una perspectiva extremista, como creer que nunca tenemos nada interesante que decir.
Saltar a conclusiones: Implica hacer suposiciones sobre las intenciones o pensamientos de los demás, incluso sin tener evidencia para respaldarlas.
Personalización: Nos culpamos a nosotros mismos por los eventos negativos que ocurren a nuestro alrededor, creyendo erróneamente que todo es nuestra responsabilidad.
Estas son solo algunas de las distorsiones cognitivas que pueden afectar nuestra percepción y causar ansiedad. Desafiar y cambiar estas distorsiones no es fácil, pero es posible con conciencia y práctica.
Superando las distorsiones cognitivas para un mayor bienestar
El primer paso para desafiar las distorsiones cognitivas es ser consciente de ellas y prestar atención a cómo nos estamos diciendo a nosotros mismos las cosas. Al igual que cuidamos de nuestro cuerpo con ejercicio y buena alimentación, debemos cuidar de nuestra mente adoptando hábitos mentales saludables.
No permitas que tus pensamientos y emociones te controlen: Recuerda que tus sentimientos negativos no siempre se basan en hechos reales, sino que son influenciados por tus emociones. No te dejes llevar por ellos sin cuestionarlos.
Afronta los desafíos con una actitud positiva: En lugar de amplificar tu ansiedad, adopta una mentalidad positiva y confía en que podrás enfrentar cualquier obstáculo que se te presente.
Evita la personalización y el catastrofismo: Recuerda que los eventos externos no siempre tienen un significado personal. No te culpes a ti mismo por todo y evita imaginar los peores escenarios posibles. En cambio, enfócate en soluciones y oportunidades para crecer.
Manteniendo estas prácticas, te liberas de las distorsiones cognitivas inútiles y te abres a una vida de mayor éxito, relajación y disfrute en tus relaciones personales. Si necesitas apoyo para manejar estas distorsiones, siempre puedes acudir a profesionales capacitados en terapia cognitiva conductual y otros enfoques terapéuticos.
Recuerda, nadie está libre de caer en viejos hábitos o recaer en ocasiones. En lugar de buscar la perfección, enfócate en el progreso constante. A medida que te liberas de las distorsiones cognitivas y cultivas una mentalidad saludable, estarás más preparado para enfrentar los desafíos que la vida te presente y disfrutar plenamente de cada momento.
No olvides que el cuidado de tu salud mental es una parte esencial de tu bienestar general. Si sientes que necesitas apoyo adicional, no dudes en buscar ayuda de profesionales y recursos disponibles en tu comunidad.
Artículo optimizado para SEO. Publicado en Harvard Health en 2022.