La Banda del Estado rinde homenaje a José Alfredo Jiménez en la Alhóndiga de Granaditas
Desde uno de los lugares más emblemáticos de Guanajuato, la Alhóndiga de Granaditas, se llevó a cabo un emocionante homenaje a uno de los más grandes compositores de México, José Alfredo Jiménez. En el marco del 50 aniversario de su fallecimiento, el Festival Internacional Cervantino (FIC) presentó Joyas Perdidas «José Alfredo Jiménez», donde la talentosa Olivia Gorra entregó su voz al maestro y cautivó a todos los asistentes.
Un encuentro con la música vernácula llena de emoción y fusión
El concierto fue todo un éxito, logrando tocar el corazón de los guanajuatenses a través de canciones que hablan de amor y desamor. Pero lo que hizo de esta presentación algo mágico y especial fue la combinación de la música vernácula con los instrumentos de viento y percusiones. Clarinetes, tubas y trombones se unían para crear melodías inolvidables, mientras que el público demostraba su pasión y amor por la música mexicana.
El público entonaba a todo pulmón las famosas estrofas de José Alfredo Jiménez, como «Sin nos dejan, buscamos un rincón cerca del cielo, si nos dejan haremos con las nubes terciopelo. Y ahí juntitos los dos, cerquita de Dios será lo que soñamos. Si nos dejan, te llevo de la mano corazón y ahí nos vamos». Fue un momento lleno de emoción y conexión entre todos los presentes.
La música que trasciende fronteras y une corazones
La Alhóndiga de Granaditas se convirtió en un lugar donde la música unió a las personas. Se cantaron temas icónicos como «Dios me dijo», «Si nos dejan», «Amanecí entre tus brazos» y «Te solté la rienda», entre muchos otros. Fue una velada llena de nostalgia y recuerdos, donde cada nota resonaba en el alma de los presentes.
La Banda del Estado: 167 años de historia y legado musical
La Banda del Estado, con más de siglo y medio de existencia, sigue dejando su huella en la música guanajuatense. Con sus raíces en los grupos militares formados en Guanajuato en 1767, a raíz de los disturbios por la expulsión de los jesuitas, se ha convertido en una de las agrupaciones más importantes y versátiles de la región.
Su elección para perpetuar la música de José Alfredo Jiménez fue acertada, ya que representa la esencia y el espíritu del pueblo. Con su maestría y pasión, la Banda del Estado sigue llevando en alto la música tradicional mexicana y inspirando a generaciones de músicos y compositores.